Pareciera que muchos de los sectores se han unido a la reducción de sus salarios y a la carencia de poder contar con un trabajo, pero muchos se resisten a los nuevos protocolos y a la nueva forma de vida. La pandemia ya sabemos que fracturó todos los sectores, pero no podemos permitir que las universidades hagan un capricho y que en estadísticas sus aportes a la ciudadanía sean mínimos.
El conflicto de las instituciones, los jóvenes, las ideologías políticas y la ciudadanía puso en entredicho que los intereses no van en común. La reducción de presupuesto o donación de un porcentaje hizo que muchos académicos brincaran de su silla para quejarse sobre sus salarios.
Ecuador sufre una corrupción dentro de sus instituciones académicas, y por eso demasiados han hecho del presupuesto su gran aguinaldo durante muchos años y a veces su excesiva independencia los ha llevado a estar en la lista de los más corruptos. Su trabajo pareciera que se volvió más político, más allá de aportar investigación o el desarrollo de proyectos funcionales para la ciudadanía.
Los rectores en las escuelas públicas son de los asalariados más altos y los que menos contribuyen; de la misma manera su trabajo se enfoca en crear política y al igual solo juegan a dar una supuesta TRANSPARENCIA…, de esta misma manera es deplorable ver cómo la investigación se PROSTITUYE y se forja para intereses personales y nada académicos.
En mi trabajo como asesor siempre reafirmo que una institución basada y justificada al 100% en el erario público está condenada a caer en la CORRUPCIÓN, al igual que juega un rol importante en su administración y sus decisiones. Me tocó ver en algunas escuelas de Ecuador cómo el dinero era ocupado para el nepotismo, para un desvío de dinero a los supuestos deportistas y para ciertos personajes allegados al manejo del rector y sus bolsillos.
Las veces que le hemos hecho saber a Agustín Albán lo que pasa en su dirección no es algo lejos de lo que vivió en México y es por eso que tampoco salió bien librado de allá. Al mismo tiempo entenderá que se enfrenta a un grupo de una SECTA ideológica que controla a jóvenes y personal, y más allá de ser anarquistas, izquierdistas y tanta barbarie crean que los identifica, se han vuelto lo mismo que siempre han criticado: DICTADORES DE LA EDUCACIÓN.
Lo hemos dicho muchas veces, deben quitar los nombramientos que en su mayoría fueron coludidos; quitar a los que les dan favoritismo por ser codependientes de un movimiento que solo mantiene a unos cuantos y no favorece a alumnos (movimiento que tiene demandado a su representante nacional por modificar calificaciones y amenazar a profesores).
Todo esto demostró que la academia recibe mucho y aporta poco, que lo que se invierte no da resultados en las estadísticas y que además crear INTELECTUALES ORGÁNICOS no suele ser nada visible ni viable. La academia le pide a los gobiernos hacer mucho con poco presupuesto, y bueno, ahora es tiempo de que ocupen esa frase a su favor y dándoles un pequeño consejo: “Una buena universidad vive de las ideas de los alumnos y académicos, de proyectos registrados y sostenibles, de pymes y de aportes a la ciudadanía”. No por nada Steve Jobs, Zuckerberg y Slim estaban en contra del sistema académico. (O)
2 comentarios en «¡Universidades caprichosas!»
Quién es el que escribe esto? Un completo desconocido. Muy crítico al sistema pero con un letargo asociativo en la comprensión política integral. Asesor? De quién? Tal vez por eso no es conocido…
No se trata de si es o no conocido, además los asesores por lo general no son visibles, creo q cualquier persona es libre de expresar su opinión. Por otro lado lo que el artículo dice es que la educación está siendo mutilada con o sin presupuesto, no han hecho nada por la educación, recordemos que en la estatal de Guayaquil se sacó a la luz como 4 casos de corrupción. Entonces con o sin presupuesto igual nos roban! Y el perjudicado en este caso los jóvenes que pertenecen a una clase social que no puede acceder a una educación pagada.
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